Estudios de la influencia del Pantano de Elche en calidad de aguas del río Vinalopó

Autores: Irene Amorós Zaragoza, Borja Mateu Romero, Ignacio Meléndez Pastor

“El agua es el origen de todas las cosas” Tales de Mileto (630- 545 a.C.)

Paseando por los caminos próximos al río Vinalopó que discurren entre Aspe y Elche, es fácil sorprenderse por las distintas formaciones geológicas, con variada litología que queda expuesta a nuestros ojos en los abundantes riscos y barrancos; la exuberante vigorosidad de la vegetación junto al río, que contrasta con los matorrales xerófitos unos pocos metros ladera arriba; así como deleitarse con las observación y audición de las numerosas aves acuáticas que pueblan este entorno. La coexistencia de estos elementos en armonía tiene un común denominador, el agua del río Vinalopó. Ese pequeño cauce es responsable del paisaje que admiramos, de la flora y la fauna que ahí habita; en definitiva, el origen principal de todo lo que constituye el entorno del Pantano de Elche.

agua vinalopo
Figura 1. Aspecto típico del río Vinalopó aguas abajo del Pantano de Elche.

Durante nuestra formación como Graduados/Licenciados en Ciencias Ambientales, uno de nuestros grandes temas de estudio es el agua, tanto desde el punto de vista de los mecanismos que permiten el ciclo hídrico, los problemas de cantidad y calidad, así como las tecnologías empleadas para tratar nuestros vertidos y potabilizar el agua que consumimos. El agua es un compuesto básico para la vida y por ella nos preocupamos, debatimos e irracionalmente contaminamos. El río Vinalopó es notable ejemplo de ello, pues a lo largo de su curso, el fresco río que discurre por la Sierra de Mariola es brutalmente degradado hasta convertirse en un cauce en el que, a buen seguro que no resulta apetecible para bañarse en él y menos para consumir su agua. En una zona con escasos recursos hídricos, esta situación de que los pocos recursos hídricos disponibles estén tan degradados, resulta especialmente hiriente, motivo de reflexión y autocrítica.

Asumiendo que el río Vinalopó ha sido en gran medida degradado por nuestras actividades, es hora de ponernos manos a la obra para reconducir esta situación y conseguir que sea un cauce vital en todo su curso. Ello nos ha motivado a desarrollar trabajos de investigación desde el Área de Ingeniería Química del Departamento de Agroquímica y Medio Ambiente, que nos permitan comprender aspectos de interés como: 1) la dinámica de contaminantes y capacidad de autodepuración de los ecosistemas como base fundamental para una mejor gestión de vertidos; y 2) la posibilidad de implementar sistemas de bajo coste e impacto ambiental que ayuden a mejorar la calidad de la aguas del río Vinalopó.

Irene Amorós Zaragoza y Borja Mateu Romero son Graduados en Ciencias Ambientales por la Universidad Miguel Hernández de Elche en el curso 2014-15. Durante sus Trabajo Fin de Grado han desarrollado una interesante investigación conforme a las dos líneas anteriormente mencionadas. Su investigación, dirigida por el profesor y Licenciado en Ciencias Ambientales Ignacio Meléndez Pastor, les permitió realizar una primera evaluación de la capacidad de depuración de contaminantes por parte del Pantano de Elche y dimensionar sistemas de humedales artificiales que puedan contribuir a mejorar la regeneración de la calidad de las aguas del río Vinalopó.

En ambos trabajos se pudo disfrutar del entorno del Pantano de Elche, tanto en el reconocimiento a pie de la zona de estudio, como en los diferentes muestreos de aguas realizados. Esto nos permitió conocer algunos de los mejores rincones del Pantano de Elche, tan interesantes como de difícil acceso, en los que el trabajo en equipo y la motivación por comprender y mejorar nuestro entorno fue fundamental.

Irene, en su trabajo titulado Modelización de la calidad de aguas en cursos eutrofizados, fue capaz de realizar un balance de materia de la acumulación de sedimentos y transformación de nitratos en el humedal que constituye el Pantano de Elche. Determinó propiedades físico-químicas de las aguas y caudales del río, en diversos puntos de la zona húmeda y lámina de agua del Pantano de Elche. Estudió la variabilidad de dichos parámetros a lo largo del tiempo y el espacio, ayudándose de herramientas estadísticas y un Sistema de Información Geográfica (SIG). Con todo ello pudo cuantificar la capacidad de retención de sedimentos (expresada como sólidos en suspensión) y la dinámica de un contaminante como son los nitratos, en el fluir de las aguas del río por el Pantano de Elche. Es muy notable la importancia de la zona de estudio en la mejora de la calidad de las aguas del Vinalopó. Tanto la zona de lámina de agua en la zona de carrizal son fundamentales en el control de la eutrofización y biodiversidad del río. El carrizal, tantas veces considerado como poco atractivo, es absolutamente fundamental en la supervivencia del entorno actual, pues contribuye al control hídrico, la transformación de contaminantes y da cobijo a múltiples especies de fauna.

Borja, en su trabajo titulado Estudio y dimensionado experimental de humedales artificiales para la mejora de la calidad de aguas de cursos de agua eutrofizados, fue capaz determinar las dimensiones y características que podría tener un humedal artificial a situar en el entorno del Pantano de Elche, que contribuyera sustancialmente a reforzar la capacidad de depuración del humedal natural. Durante su trabajo determinó propiedades físico-químicas de las aguas y caudales del río que llegan al Pantano de Elche. Estudió los mecanismos de depuración que se desarrollan en los humedales y diferentes formulaciones desarrolladas para cuantificar tales capacidades de depuración. Desarrollo una aplicación informática para el diseño de humedales artificiales, que en base a los datos que adquirió en su trabajo de campo, permitiera evaluar objetivos de mejora de la calidad de las aguas del Vinalopó.  Estos humedales, se sumaría a la labor de autodepuración del Pantano de Elche. Se determinó que la configuración más interesante sería  un sistema híbrido, compuesto por un humedal de flujo subsuperficial seguido de un humedal de flujo superficial, ambos plantados con Phragmites australis. Este diseño satisface premisas fundamentales de sostenibilidad ambiental, debido a su buena integración paisajística, mínimo consumo energético, buen rendimiento, y reducidos costes de construcción y mantenimiento.

Ambos trabajos son buen ejemplo de aplicación práctica por parte de Graduados en Ciencias Ambientales, de los conocimientos de Ingeniería Ambiental que se adquieren en las asignaturas de dicha materia (i.e., Bases de la Ingeniería Ambiental e Ingeniería y Tecnología Ambiental) en la Universidad Miguel Hernández de Elche.

Elche, Enero de 2016

Referencias y Bibliografía:

Este contenido está basado en elaboración propia y en referencias y bibliografía complementaria.

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