El buitre leonado (Gyps fulvus) es una rapaz carroñera presente en la práctica totalidad de la Península Ibérica. Sus principales poblaciones se encuentran en las grandes cadenas montañosas y los barrancos horadados por los ríos que atraviesan las mesetas centrales. Esta especie está especialmente asociada a aquellos lugares con una gran carga ganadera, siendo ellos los encargados de eliminar todas los animales fallecidos por causas naturales en el campo. Esta beneficiosa función ayuda entre otras cosas a la eliminación de restos animales procedentes de la ganadería así como a mantener el control de diferentes enfermedades infecciosas o a prevenir la contaminación del medio hídrico entre otros. Esta especie era muy abundante en toda la península, pero fue en el siglo XX cuando las poblaciones de este y otros buitres comenzaron a disminuir drásticamente fruto de la intervención humana a través de grandes campañas de envenenamiento. Esta situación llevó al buitre leonado en muchas zonas de España al borde de la extinción. En algunas zonas fue totalmente eliminado como fue el caso de las sierras de la provincia de Alicante, quedando este ave solamente presente en la toponimia de aquellos macizos y sierras donde alguna vez habitó.
Fue en el año 2000 cuando la ONG sin ánimo de lucro Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (FAPAS) empezó con el Projecte Canyet, una iniciativa cuyo objetivo es la recuperación estable del buitre leonado en la Comarca Alicantina de L’Alcoià. Para ello esta asociación realizó la reintroducción de la especie en el Monte público Sant Cristòfol (Alcoy) y gestionan un muladar donde facilitan a los buitres un aporte alimenticio procedente de restos de ganadería doméstica principalmente.
Otra de las actividades desarrollada en Projecte Canyet es el Seguimiento de los buitres leonados que habitan de nuevo este espacio. El Grupo Naturalista de la UMH pudo asistir al desarrollo de esta actividad el pasado sábado día 28 de noviembre y participar en el marcaje de esta gran rapaz carroñera para su seguimiento. Este marcaje se realizó mediante anillas metálicas y anillas de PVC y marcas alares visibles a gran distancia y que permiten el reconocimiento de los individuos marcados.
Nuestro objetivo visitando este interesante proyecto era conocer los métodos de estudio desarrollados en el Projecte Canyet y el trabajo totalmente altruista que han desarrollado los miembros de la asociación FAPAS durante 15 años para que este gigante alado vuelva a habitar en las montañas del Norte de Alicante.
Queremos mostrar todo nuestro agradecimiento por esta gran experiencia a todos los miembros de FAPAS Alcoy y nuestro enhorabuena a este gran proyecto.